El final estaba cerca, el emperador, cansado y enfermo ha decidido abdicar en su hijo Felipe y su hermano Fernando, y el Monasterio de Yuste le aguarda para un retiro tranquilo, alejado de los grandes centros de conflicto y poder. El último viaje entre Laredo y Jarandilla de La Vera (antes de retirarse a Yuste pasará unos meses en el castillo de los Condes de Oropesa), permitirá a Carlos recorrer Castilla por última vez, a través de las Merindades burgalesas, las tierras de campos de Burgos, Palencia y Valladolid y la Sierra de Gredos que cruzará para alcanzar la atemperada y tranquila comarca de La Vera.